Llenaste mi tarde de lamentos y perdones...
Queriendo recuperar lo que perdimos hace algún tiempo
Razones jugando con excusas para sobrevivir
Y la melancolía que se apodera poco a poco de la alegría...
No voltees tu rostro cuando escuches tu nombre...
Es un sonido involuntario de mi subconciente
Olvida las dos promesas y media
Y guarda la lluvia para peores soles...
Adiós princesa, adiós viejo amor...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario